Encontrando fe en el hoyo

“Que el Dios de la esperanza los llene de toda alegría y paz a ustedes que creen en él, para que rebosen de esperanza por el poder del Espíritu Santo.” Romanos 15:13

Encontrando fe en el hoyo

 

“Dios se deleita en aumentar la fe de sus hijos. En lugar de desear que no haya pruebas antes de la victoria, ni ningún ejercicio de paciencia, deberíamos estar dispuestos a afrontarlas de las manos de Dios como medio. Las pruebas, los obstáculos, las dificultades y a veces las derrotas, son el alimento mismo de la fe.” George Müller

Hace aproximadamente un año, recibí una llamada telefónica de mi esposo, quien dijo las temidas palabras que ninguna esposa quiere escuchar: “Hoy perdí mi trabajo”. Mi corazón se hundió y mi boca se secó tanto que no podía hablar. Estábamos en un pozo profundo y oscuro, y todo lo que quería era que salierámos de ese momento estresante y volvieramos a estar cómodos. Perder un trabajo es duro. Afecta a nuestros maridos más de lo que podemos entender. Pierden el sentido de su identidad y se sienten impotentes. Fue un momento muy bajo en mi vida y mi matrimonio. Tal vez tú hayas estado allí o estés viviendo esta vida ahora mismo, y nosotros ya habíamos estado allí antes. Pero esta vez sabíamos que Dios tenía un camino para nosotros. En lugar de intentar resolver el dilema lo más rápido posible y lanzarnos a un nuevo trabajo lo más rápido posible, poniendo una curita a nuestro problema, tomamos un enfoque de manera diferente que antes: ¡oramos mucho! Echamos una mirada interna a nuestras vidas pecaminosas y realmente hicimos un examen de conciencia. Pasamos por un período de “poda”, que fue extremadamente duro, pero como cualquier jardinero sabe, después de una buena poda, la próxima cosecha produce muchos buenos frutos (Juan 15).

Mientras estaba en esa temporada, el Señor me llamó a Su Palabra y me llenó de esperanza. La esperanza que sentí no era sólo un deseo vacío, de desear un resultado bueno o rápido. Más bien, era una certeza profunda, arraigada en lo más profundo de nuestras almas y envuelta en una “expectativa confiada”.

He aprendido que este tipo de esperanza nos da una confianza que ninguna definición terrenal de esperanza puede alcanzar (Romanos 15:13 NVI). Cuando comencé a leer mi Biblia diariamente, recordé que debía perseverar (Romanos 5:3-5; Hebreos 10:36; Santiago 1:2-12), encontrar nueva confianza para caminar en los caminos de Dios (Romanos 12:12; 15 :13; Efesios 3:12; Hebreos 10:35), y descubrir una confianza renovada para confiar en Él (Proverbios 3:5-6; Jeremías 17:7-8). En ninguna parte de la Biblia encontré que dijera que deberíamos rendirnos, resolver rápidamente nuestros problemas o demostrarle al mundo que podemos sobrevivir por nuestra cuenta. Lo más importante es que no encontré versículos que dijeran que fuera posible vivir una vida cómoda y libre de dificultades.

A lo largo de nuestras pruebas, me sentí continuamente atraída por Hebreos 10:19–12:3. Estos capítulos hablan sobre el sufrimiento, el cumplimiento de nuestras promesas y los pueblos antiguos que eran conocidos por su gran fe. Muchos de ellos sufrieron profundamente y ni siquiera recibieron sus promesas, pero aun así vivían por fe cuando murieron (Hebreos 11:13,39). Al elegir activar su fe, caminaron en obediencia, confiando en que Dios los guiaría. Creo que Dios también nos estaba guiando a mi esposo y a mí a un lugar nuevo, y este lugar estaría arraigado en Él y preparado de antemano, tal como los israelitas (Éxodo 23:20-23). También rápidamente comenzamos a darnos cuenta de que nuestra obediencia y disciplina eran de suma importancia para nuestro Padre (Hebreos 12:7-11). Ahora comenzamos todos los días de la semana a orar juntos mientras él conduce al trabajo y verificamos cómo le va al otro, si todavía estamos caminando en la voluntad de Dios para nosotros, dejando atrás nuestros viejos hábitos. ¡Nos apoyamos mutuamente manteniéndonos firmes y haciéndonos responsables unos a otros!


IDEA LLENA DE FE: Una declaración de fe 

Escribe tu propia declaración “por fe” sobre ti misma. Reflexiona sobre tu vida y piensa en cómo Dios describiría tu camino de fe. ¿Cuándo has respondido puramente por fidelidad y obediencia a Él? Consulta Hebreos 11 para ver ejemplos.

Por ejemplo, el mío diría: “Por fe, Kristall, cuando Dios la probó, apoyó a su esposo y confió en que los caminos de Dios eran mejores. Se hizo a un lado, hizo caso omiso de la sabiduría mundana y confió en que Dios usaría su esposo.

 

Con amor,

Kristall Willis y el Equipo del Club de Ayuda para Mamás

Kristall Willis
Latest posts by Kristall Willis (see all)

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Time limit is exhausted. Please reload the CAPTCHA.

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.