“Los que viven conforme a la carne fijan la mente en los deseos de la carne; en cambio, los que viven conforme al Espíritu fijan la mente en los deseos del Espíritu. La mente gobernada por la carne es muerte, mientras que la mente que proviene del Espíritu es vida y paz.” Romanos 8:5-6
Viviendo por el Espíritu
“Oh Espíritu Santo, desciende abundantemente a mi corazón. Ilumina los rincones oscuros de esta olvidada morada y esparce allí tus alegres rayos.” San Agustín
Por muy emocionada que estuviera por convertirme en esposa y madre, me sentí poco estaba preparada para los desafíos que me esperaban. Cuando era una joven madre abrumada, recurrí al mundo en busca de orientación. Durante esos años, busqué ayuda y busqué respuestas sobre la vida, el matrimonio y la crianza de los hijos viendo programas de televisión por las tardes, hablando con amigas y leyendo libros de autoayuda. Cuando miro hacia atrás, me sentí tan desesperada durante esos años. Las tormentas de la vida eran abrumadoramente difíciles de sortear y la oscuridad lo consumía todo. Era imposible encontrar mi camino; necesitaba la Palabra de Dios para iluminar mi camino.
Aunque era cristiana y asistía a la iglesia todos los domingos, no pasaba tiempo en la Palabra de Dios, buscándolo a Él por liderazgo y dirección. Necesitaba revelación de que Jesús era la Luz del Mundo (Juan 8:12) y que bajó del cielo, tomó forma de hombre y vino a salvar a los perdidos, como yo (Lucas 19:10). Querida mamá, tal vez eres como yo y necesitas llevar tu relación con Dios a un nuevo nivel y comenzar a leer tu Biblia todos los días.
¿Alguna vez has acampado cuando hay luna nueva? Cuando se pone el sol, debes estar preparada para la oscuridad, llevando una lámpara para iluminar tu camino. Incluso si tienes una fogata encendida o una lámpara brillante encendida en la mesa de picnic, aún así no podrás ver el camino hacia tu campamento. Sin tu lámpara, caminas en las sombras y corres el riesgo de tropezarte con rocas o tropezar en terrenos irregulares. Esto es lo mismo para nosotros cuando vivimos en la oscuridad. Nos abrimos camino a tientas para sortear obstáculos y ocasionalmente nos golpeamos los dedos de los pies. Necesitamos la Luz del Mundo para iluminar nuestro camino.
Me encanta la metáfora de que la Palabra de Dios es nuestra lámpara para la vida. Salmos 119:105 dice: “Tu palabra es una lámpara a mis pies; es una luz en mi sendero”. La Palabra de Dios ilumina nuestro camino para que podamos ver y evitar el barro y el fango de este mundo, también conocidos como malas decisiones o caminos equivocados. Su Palabra iluminará nuestro camino, dirigiendo todos y cada uno de nuestros pasos. Cuando leemos y meditamos en las Escrituras, transforma nuestro pensamiento.
Cuando te convertiste en cristiana, Dios te dio el Espíritu Santo para que viniera y viviera dentro de ti para ayudarte a comprender los misterios de la Biblia. Él te enseña y te recuerda lo que Jesús enseñó (Juan 14:26), y te guía a toda la verdad (Juan 16:13). Ya no necesitas caminar en la oscuridad; puedes usar la “lámpara” de la Palabra de Dios para iluminar tu camino.
IDEA LLENA DE FE: Una canasta para momentos de tranquilidad
Llena una canasta con todos los suministros que necesitarás para un momento de tranquilidad con Dios. ¡Todo estará a tu alcance cada vez que te encuentres con Jesús! Aquí hay algunas ideas:
- tu diario bíblico
- resaltadores o bolígrafos chocolates
- libros devocionales
- tarjetas de agradecimiento
- notas adhesivas
Con amor,
Jennifer Valdois y el Equipo del Club de Ayuda para Mamás
Jennifer is a Colorado Springs native and each year,looks forward to summer time when she experiments with vegetable gardening and escapes to the Rocky Mountains for camping trips with her family.
She is trusting Jesus to redeem her life and crown her with love and compassion as He promises in Psalm 103:2-5.
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