Identificándose con Marta

“Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, entonces todas estas cosas les serán añadidas.” Mateo 6:33

Identificándose con Marta

 

“Estoy demasiado ocupada; oh, amado Señor, perdóname que alguna vez esté demasiado absorta en las tareas terrenales como para pasar una hora contigo.” A.B. Christiansen

  • Dulce mamá, ¿tu “lista de cosas por hacer” es de un kilómetro de largo hoy? De una persona que se destaca en el trabajo a otra, sentémonos un rato, respiremos profundamente y volvamos a centrarnos en cómo debería ser nuestra tarea doméstica. Lean conmigo el relato de Marta en Lucas 10:38-41.

¡Soy una mamá OCUPADA! Tengo cinco hijos en crecimiento, desde jóvenes adultos hasta una niña de segundo grado que acaba de perder sus dos dientes delanteros. Me mantengo ocupada sin parar manejando una familia de siete, incluyendo toda la ropa, la planificación de las comidas, la planificación de las fiestas, las compras, el pago de las facturas y el uso compartido del coche. Suena agotador, ¿no? Adivina qué: ¡me encanta todo! Supongo que me han condicionado a estar ocupada, pero también me encanta serlo. Ser ama de casa es algo natural para mí, me encanta planificar, preparar, lograr cosas y tacharlas de mi lista. ¿Hay alguien más como yo?

El cuidado del hogar no se trata solo de hacer que nuestros hogares sean lugares hermosos para vivir o tachar tareas de una lista; también se trata de nutrir y dar en la vida de aquellos que el Señor ha puesto a nuestro cuidado. Hermana, la verdad es que estar ocupada puede robarme las cosas MÁS importantes, como el tiempo con Jesús y crear recuerdos diarios especiales con mi familia.

Mi lucha no es hacer las cosas, sino bajar el ritmo para oler las rosas, por así decirlo. Mi problema es que una vez que mi plato está vacío, ¡lo lleno con más cosas por hacer! ¡Soy Marta de pies a cabeza! La referencia a Marta en las Escrituras a menudo se reconoce como negativa. Es cierto que estaba demasiado ocupada preparándose para Jesús, que se perdió sentarse a sus pies como su hermana María. Lamentablemente, sacrificó estar en la presencia del Señor al estar demasiado distraída sirviendo. Jesús la reprendió por no prestar atención a lo que era más importante. Esta Escritura definitivamente me convence, como debería.

La historia de Marta me ayuda a poner en perspectiva la importancia de pasar tiempo a solas con el Señor. Saber que es necesario programar un tiempo con mi Salvador primero pone esta prioridad en el tope de mi lista. No quiero perderme el dulce momento íntimo de conversar con Jesús en oración ni la gloria de adorarle sin tapujos. ¡El tiempo con Jesús me da energía! Leer la Palabra de Dios también me capacita. La ventaja es que Dios me ayuda a organizar mi día cuando se lo entrego y le pido que dirija mis pasos. También me da motivación para las cosas que aún no he hecho, así como la gestión del tiempo para hacer lo que aún es necesario. Hermana, ¡hacer tiempo para Jesús es MÁS importante!

Bendiciones y amor,

Rae-Ellen y el equipo del Club de Ayuda para Mamás

Pregunta para reflexionar

  • ¿Qué consume tu tiempo y te mantiene tan ocupada? ¿Puedes reducir la velocidad y pasar más tiempo con Jesús y tu familia? Tómate un minuto para escribir dónde podrías tener espacios de tiempo sin compromiso. Simplemente registrar dónde tengo tiempo libre me hace responsable de usarlo sabiamente. Humildemente te desafío a que pruebes este nuevo estilo de aprovechar al MÁXIMO tu tiempo libre, ¡haciendo que las inversiones en tu familia sucedan cada vez que puedas! Ah, y dulce mamá, sé amable contigo misma, aquellas de nosotras que estamos programadas para estar ocupadas somos un trabajo en progreso.

Ideas llenas de fe

Me identifico con Marta, pero también con María. Ya no degrade mi pasión por ser una “hacedora” (tú tampoco deberías hacerlo), ¡pero las mamás ocupadas SÍ necesitan equilibrio! Estar ocupadas no es el problema, pero desear y encontrar tiempo para estar con Jesús puede serlo. Sigue mi consejo y acércate diariamente al trono de la gracia y pídele a Jesús que te dé la administración del tiempo en tu trabajo doméstico y en la crianza de los hijos. Pídele la gracia de decir “No” cuando haya demasiadas cosas que demanden tu atención. Él podría fortalecerte para hacer todo en el poder de Su Espíritu y invitarte a sentarte a Sus pies por un rato.

Rae-Ellen Sanders
Latest posts by Rae-Ellen Sanders (see all)

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Time limit is exhausted. Please reload the CAPTCHA.

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.